lunes, 30 de junio de 2008

Y pudieron haber sido cuatro.

Mareaíta tenía Zapatero a Ángela Merkel en la final del Campeonato de Europa que ganamos nosotros. Los españoles, claro. Y Zapatero allí, aplaudiendo como un español más. Sí, señor.Así se hace. ¿Qué querían los caraduras que se apuntaban al triunfo de Rusia o de Turquía, que se fuera con los equipos derrotados como ellos con sus ideas caducas y su odio de cartón piedra?
Lo que yo no sé es lo qué les contestará el presidente cuando esos ilustres politicastros le pregunten el por qué se hallaba allí y tengan el desahogo de censurárselo, que de todo son capaces. Ni tampoco sé de qué hablaban la Merkel y él. ¿De la Alianza de Civilizaciones?... A lo mejor. No en alemán es Nein. Por favor, Bitte y “me alegro de verte bueno”… ¿?...
Antes del trascendental partido, cuando las cámaras hacían una panorámica recogiendo los espectadores ilustres y apareció Su Majestad el Rey, alguien dijo:
-- Nos da suerte, ganamos.
Luego, cuando en un movimiento inverso, se detuvieron ante José Luis Rodríguez Zapatero, otra voz se lamentó:
--- ¡Creí que no iba a venir! ¡Qué se lo prohibirían! Tiene mal fario. Perdemos.
Pero ganamos.
Marcó el jovencísimo Fernando Torres como Marcelino lo hiciera en 1964 consiguiendo la primera Eurocopa para España.
Ganamos por uno, cuando pudimos habernos impuesto por cuatro. Lo menos.
A Zapatero tenemos que reclamarle tres goles. Y al Rey darle las gracias por haber aparecido por el estadio vienés porque… ¡ mira que si el Rey no va y Zapatero, sí…!
Si el Rey de España no hubiera aparecido por ese inmejorable escenario deportivo que es el estadio Ernst Happel de Viena con ese complemento perfecto e inseparable que es la Reina Doña Sofía y Zapatero llega y se sienta al lado de la Merkel y se pone a desarrollar sus coherentes ideas en la lengua que enseñaba don Humberto Paulo Spiss (Gutten morgen, meinen damen und herren..) en Radio Nacional de España, emisora de Sevilla, no sé que hubiera sido ni de “la roja”…ni del “sabio de Hortaleza” porque no hubiera habido Torre alguna con que enrrocar tanta guasa.
El Rey fue y el partido se ganó. Somos campeones de Europa.
Con el Rey y con esa Selección Nacional deberíamos haberlo sido por goleada.

domingo, 29 de junio de 2008

Una pregunta sobre el humor.

Aquel hombre vivía feliz. Leía los periódicos. Oía la radio. Atendía las conversaciones sobre cuestiones actuales entre familiares y amigos… Y escuchaba a su mujer para que no le tildasen de maltratador porque ya sabe usted que si su parienta viene de la peluquería y le pregunta eso de ¿qué tal? y usted tiene todos sus cinco sentidos puestos en el gol de Guiza que se lo están repitiendo por la tele y no le responde puede ser tildado de eso. (Más o menos es lo que se desprende de una “cuña” que emiten las emisoras de vez en cuando).
Y, como era feliz, y deseaba continuar siéndolo, el coste de la vida hasta ahora no le había preocupado en demasía. Su actitud ante las variaciones del IPC se desprendía de una frase que repetía cuando llegaba la ocasión: “¿qué sube la gasolina?... me da igual. Yo siempre le pongo a mi coche veinte euros…”
La luz roja intermitente de la alarma empezó a parpadear cuando el vehículo se negó a llegar a la playa el fin de semana con ese suministro… le siguió parpadeando cuando en el chiringuito pagó por dos cervezas y sus correspondientes sardinas asadas casi el doble de lo que abonaba el año anterior y se fundió de parpadear tanto cuando dos ciudadanos que, como él, se tostaban al sol sobre la arena, pegaron la hebra y en vez de hablar de los últimos acontecimientos del fútbol o del toreo revolucionario de José Tomás, tuvieron el mal gusto de comentar los precios de los alimentos y dijeron que el trigo se ha encarecido un 130 por ciento entre marzo de 2007 y 2008… el arroz un 74 por ciento y el maíz un 31 por ciento.
Estas conversaciones deberían estar prohibidas en la playa. Determinado tipo de cuestiones no deben sacarse en una charla de sobremesa tras una buena comida ni en los lugares de asueto porque las digestiones se cortan y el descanso relajado se desvanece entre los nubarrones de la preocupación.
Por eso el Gobierno que celosamente como un padre cuida de la salud mental y el reposo debido de sus gobernados creó el Ministerio de Igualdad y lo puso al cuidado de Bibiana Aido y, por si fuera poco, elevó a Miguel Sebastián a Ministro de Industria, Comercio y Turismo.
El emparejamiento no es ocioso. Si la gaditana más ilustre de los últimos tiempos, la Excelentísima doña Bibiana, ha demostrado su originalidad y buen humor con aportaciones tan relevantes como las palabras “miembra” y “cultura inferiorizada” , el señor Ministro ha seguido su camino y, ante la subida de la tarifa de la luz en un 5.6 por ciento que, para la mayoría de los consumidores será mayor, ha afirmado con flemática seriedad que el Gobierno lo hace “por el bien de España y del planeta”. Esto tiene una gracia que no se puede aguantá.
Pero ¿qué es?... ¿Humor inglés o humor perverso?

sábado, 28 de junio de 2008

Una ceremonia virtual

Me gustaría volver a vivir aquellos tiempos de la redacción de tarde de Radio Nacional de España y que Eduardo Bonachera, que era el redactor jefe, me pidiera que fuese a entrevistar al Rey.
Sí porque, de entrada, una vez que Santos Díaz Muriel apuntase con su dedo pulgar hacia arriba indicándome que todo estaba o.k. le preguntaría:
-- Majestad ¿qué opina usted de la inauguración de ese avión que tiene pinta de autobús de Tussán con cuatro hélices gigantes de maquinilla eléctrica de afeitar?...
(Sí. Ya se que al Monarca hay que tratarle siempre de su Majestad y que el usted es una licencia que debo autoprohibirme. Pero ¿qué quieren? : Me acuerdo de ese soldado pelota que se cuadró delante de su teniente en el primer tiempo del saludo y cuando el de las dos estrellas de seis puntas le dijo, como era preceptivo, “baje la mano”, el de uniforme sin graduación, que era más relamido que un locutor con dentadura postiza, le respondió: “Un ratito más, mi teniente. Déjeme un ratito más.”
Con un Majestad de entrada creo que Su Majestad va bien servido y lo demás rechinaría ante la proverbial campechanía y abierta cordialidad de don Juan Carlos)
Cerrado este paréntesis, ¿Cuál sería la contestación?... Pues seguro que positiva, constructiva, inteligente y sin cogerse los dedos.
Pero, hablando de dedos, como el saludo del soberano se produjo tras la ventanilla abierta de la carlinga que yo, cándido siempre, esperaba que se cerrase, segundos antes de que iniciasen las hélices de la rasuradora gigante sus vueltas imparables y el avión despegase solemnemente y no sucedió así porque cayó el telón y no pasó más, me sentí muy decepcionado.
-- ¿Qué dices? ¿Qué cayó el telón?
-- Eso, por lo menos, fue lo que me pareció. Y repito que me sentí un poco, o más bien un mucho, profundamente frustrado.
Me había atrevido a suponer que el Rey llegaría de uniforme de general del Ejercito del Aire… que se oirían los sones marciales de la Banda de Aviación… que se le rendirían los honores correspondientes y que, tras la ceremonia inaugural, los discursos.etc. el mismo don Juan Carlos pilotaría la aeronave, después del cordial saludo al que hacía referencia, elevándose con ella majestuosamente, nimbadas sus alas, abiertas y poderosas, por los cielos azules del incipiente verano de Híspalis.
¿Precioso, verdad?... Pues no fue así. El vuelo del A400M, que se ha dejado para más adelante, se ha mostrado en una ficción de ordenador. Y al Rey de España, sin uniforme, ni entorchados, ni banda de música, antes de que caiga el telón, al final de una comedia que, además, se ha interpretado en inglés.

jueves, 26 de junio de 2008

Enriqueciendo al idioma.

Pues no señor.No me voy a hacer eco de lo que han dicho dos sinvergüenzas acerca del resultado del España-Rusia, antes de jugarse el partido, porque no me da la gana.Primero porque a la vista del espléndido resultado de nuestra Selección Nacional y de su histórico recital de buen fútbol, ya se ha visto que están muy lejos de ganarse la vida como augures. Y, fundamentalmente, porque, por poco que valga este blog, tendría que desinfectarlo y olorizarlo después con Ozono pino Ruy Ran que era lo que echaban los acomodadores en el cine San Vicente de la Sevilla de mi adolescencia, los sábados y domingos, entre una sesión y otra, pulverizándolo en spray.
Pero ante lo que no me puedo resistir es leyendo lo que dice por su boquita de carmesí esa ministra creadora incansable de neologismos, protectora de la lengua y arriesgada amazona del corcel velocísimo de la nueva comunicación con palabras doradas recién extraídas del horno.
La ministra Bibiana Aido es un auténtico tesoro cuando habla, desde que en su primera comparecencia se refiriera a "los miembros y miembras de la comisión".
El miércoles último, en la inauguración de una jornada parlamentaria organizada por el PSOE sobre “El papel de las mujeres en la alianza de las civilizaciones”, aseguró que hay culturas "inferiorizadas".
¡Ole! Redoble de caja y bombo de la chirigota en homenaje a la ministra.
En el diccionario de la Real Academia aparecen inferior que es un adjetivo e inferioridad que es un sustantivo femenino. Inferiorizar, no. Lo siento. No viene.
El posible verbo con el sentido que lo aplica la juvenil componente del Gobierno, puede ser disminuir, desvalorizar, mermar, menguar, degradar,subestimar…
Lo anoto porque a la última Jefa de Prensa que tuvo, inteligente y sagaz como ella sola, le di clase en Ceade y siempre me pareció una excelente alumna y una periodista amante de su profesión. De manera que, si sigue a su servicio, a lo mejor visita este blog de vez en cuando y le puede ser útil.
Porque uno saca la conclusión de que a Bibiana, tan mona, tan movida y tan gaditana sin duda ninguna la han “superiorizado”.

Un futuro imprevisto

Habían llegado los dos con gesto adusto y sin deseo alguno de hablar. Ya se lo habían dicho todo y no era cosa de abundar en las mismas ideas ni de repetir iguales palabras con las que ninguno de los dos conseguía alejar la sombra de preocupación y de tristeza que, desde hacía unas horas, se extendía sobre ellos.
Ahora habría que dar la noticia al resto de la familia. Pero sin prisas y disimulando todo cuanto se podía las frases amargas que resumían la situación. A todos les afectaba, aunque a ellos de manera personal y directa. No concebían la vida de otra forma ni habían supuesto nunca que tuvieran que desprenderse de esa parcela de poder y de consideración social. Por mucho que le daban vueltas y vueltas en la cabeza no conseguían entenderlo porque nunca habían tenido el valor de suponerlo tal y como se había producido.
El mayor frisaba los cincuenta años. El más joven probablemente habría cumplido ya la mitad y siempre había seguido los pasos del anterior que era su progenitor. Cursó su misma carrera, como él. La mantenía sin acabar, como él…
Y había abrazado con ostensible éxito su misma actividad en la vida que le mantenía ocupado y esperanzado en su porvenir.
Se negó a suponer nunca que la tesitura que ambos empezaban a vivir desde hacía unas horas fuese a producirse alguna vez. Aunque ciego no era y, desde un tiempo a esta parte, las cosas empezaban a cambiar mucho. Pero siempre confió en la habilidad de aquel cuyos pasos seguía para mantener el rumbo de la nave según su conveniencia.
Ahora había dejado de ser así. La tormenta la habían visto venir y no habían sido capaces de capearla.
Las preguntas fluían una tras otra encadenándose con dinamismo sin el asiento de alguna respuesta sólida. Las más escindiéndose en dos con sus tesis y antitesis correspondientes.
Inútil hallar un culpable. Difícil por supuesto. Pero infructuoso, desde luego. Cuando, se quisiera o no… se asumiera o se rechazara, la historia empezaba a ser escrita por una pluma diferente.
Ninguno de los dos se confesaba idóneo para dibujar el futuro que se perfilaba en el horizonte con trazos imprecisos y oscuros. Y menos que nadie el más joven que, desde que llegó al mundo, no había conocido otra cosa. ¡Se dice pronto! Casi un cuarto de siglo. Se había preparado concienzudamente y los que le conocían decían que tenía madera. Estaba dispuesto a llegar más lejos que su padre que siempre se había mantenido en puestos secundarios desde los que poder ejercer influencia sin notarse demasiado. Pero ya sería imposible. Se le acababa de cerrar el camino.
Esa noche la candidatura de la Hermandad de Penitencia en la que, como siempre en los últimos años, figuraban los dos, en puestos distintos, había perdido las elecciones.

miércoles, 25 de junio de 2008

La vida que se va.

Lola Flores lo resumía como tema de una meditación profana ensartando las palabras encerradas en la jaula dorada de un verso en heptasílabos: “¡cómo juye la vía!”.
Juye, si. Con J. Y no con h que es una letra más transigente, más del centro de los políticos lights. Juye, que parece que corre más. Que se va a paso ligero como con el himno legionario del “soy el novio de la muerte” de los émulos actuales del general Millán Astray que se están quedando sin prometidas porque se las roban esos dos espadachines ojalateros que se llaman Ibarretche y Carod Rovira…
Te das cuenta cuando entras en Sevilla en el Tanatorio de la Ese treinta o en el otro que está más lejos y al que no quiere nadie que lleven a sus deudos por mucho que argumenten los gestores del Ocaso.
“¡Pero si yo estuve hablando ayer con él!” (Hace un mes, pero es lo mismo).
“¡Pero si yo le ví hace una semana!” (En Abril. En la Feria, pero da igual)…
Tiempo arriba o tiempo abajo… ¿qué es el tiempo…?
En la ecuación incomprensible del gran científico del siglo 20, Albert Einstein, significa entrar en el desarrollo de su teoría de la Relatividad y las ideas de la Relatividad Espacial son muy difíciles de imaginar porque no son situaciones que experimentemos en la vida diaria aunque los científicos las hayan confirmado.
Esta teoría dice que todos viajamos en el tiempo.
Por lo tanto a esa persona tan afecta a mí, de la que sigo recordando su bonomía, su sonrisa inmarcesible y su gracia oportuna y de buena ley, yo no he ido hoy al Tanatorio a decirle adiós, sino a comprobar si el medio de transporte en el que le han embarcado, aunque dudo mucho que él estuviera deseando, resulta tan puntual como el AVE.
Y, mientras espero la respuesta, recuerdo la optimista letrilla que me enseñó con su sabiduría jerezanísíma Fernando Cano:
“El que viene de un entierro --- y no se toma una copa de vino… --- el suyo viene de camino.--
Y, si en vez de una son dos – y las toma con acierto – le dará más gloria a Dios—
y más responsos al muerto. “

lunes, 23 de junio de 2008

Elecciones cofrades. Programas y candidatos.

Los programas de los candidatos a presidir una Junta de Gobierno que se cursan a todos los hermanos como material electoral en los días previos a la fecha fijada para la celebración de un Cabildo de elecciones se parecen mucho a las tarjetas de visita. Te deja una tarjeta de visita en cartulina de primera con las letras impresas en relieve y mucho título y mucho despacho y mucho teléfono y móvil y página web ese que tu conoces, que ya te la jugó tiempo atrás y que es capaz de vender a su padre para conseguir una medalla de latón y tu te dices por lo bajini ”¡venga ya!” .Y, sin embargo, te alarga el trocito impreso uno que no se atreve a poner más en él porque es consciente de lo que valen las promesas y de lo que significan para los hombres los compromisos adquiridos y tu piensas “este es de los novilleros antiguos, de los que le alquilaban a Manfredi el vestío de torear y se lo devolvían hecho unos zorros por haber soportado las numerosas volteretas que había sufrido por meterse entre los pitones”.
Y entre una tarjeta y otra, como entre los folios de los programas de los candidatos, la experiencia te obliga a preferir sabiamente no la letra inglesa y los resaltes del relieve, sino la escueta impresión a palo seco en la cartulinilla barata.
Esta sensación se acrecienta cuando el que entrega la tarjeta – entiendase el que firma el programa -reincide en el cargo. La reincidencia cofrade es muy peligrosa para el reincidente. Y más en esta tierra nuestra, propensa a sacarle la punta a todo. El candidato que ya tuvo ocasión de desarrollar un programa ambicioso en el curso de su mandato y vuelve ahora, con otro en cuya redacción se aproxima bastante a lo que escribió entonces, suele correr el peligro de que la buena memoria de alguno que otro sustente un incómodo “¿por qué no lo hiciste antes?” que lo puede descolocar con peligro cierto para su estabilidad en las urnas.
El novel suele traer un aire nuevo, una bocanada limpia, empapada de buenas intenciones y se fortalece cuando lo primero que ofrece a la colectividad cuya confianza solicita es un grupo cohesionado de hermanos conocidos, muchos de ellos con larga y ejemplar trayectoria de servicio a la hermandad, dispuestos como una piña a secundarle en sus trabajos.
Y, muy importante, como no estuvo antes en ese puesto tan decisivo y relevante que es el de hermano mayor en una cofradía, carece de antecedentes, no penales sino “penosos”, que son todos los de aquellos sentimentalmente heridos que pudo haber dejado en el camino.

domingo, 22 de junio de 2008

Chapeau para dos hermanos mayores

Me quito el sombrero. Iba a escribir me quito el capirote, pero la cosa me parece lo suficientemente seria como para tomarla, aunque sea minimamente, a broma. Me destoco en señal de respeto e incluso soy capaz de agenciarme esa especie de mitra flamenca que es un cordobés solo por el placer de arrojarlo volando por los aires perfumados de incienso hasta los pies de los hermanos mayores de la Macarena y el Calvario que aparecen en la prensa dominguera componiendo una fotografía arropados por algunos integrantes de sus juntas de gobierno delante del altar donde reciben culto el Santísimo Cristo del Calvario y su Madre Bendita de la Presentación en la Iglesia de la Magdalena.
Como una imagen vale más que mil palabras un documento grafico pone de inmediato sordina a todo pábulo y comentario desmedido y no poco desinformado que venía haciéndose en torno a un enfrentamiento entre las dos hermandades que nunca pasó de una protesta justificada del Calvario y de una incomodidad de la Macarena tal vez por las formas empleadas para llevarla a cabo.
El hecho cierto es que la Cofradía de la Macarena dejó más de veinte minutos de retraso en la Campana y como el Calvario se había comprometido a adelantar su salida un cuarto de hora y cumplió su promesa para favorecer el mejor desarrollo de la jornada, sumaron treinta y cinco los minutos que duró un parón que como suele suceder se hizo insoportable y repercutió en otras cuatro hermandades.
¿Qué el Calvario le pudo haber hecho llegar a la Junta de Gobierno de la Macarena eso que eufemísticamente se denomina en el argot diplomático una “nota verbal”? Pues, sí. Pero lo hizo por escrito “para expresar este disgusto, reclamar la tan necesaria solidaridad de todas las hermandades de la Madrugada y para ofrecer toda su colaboración con el espíritu fraterno de encuentro y abrazo que siempre caracteriza a la Hermandad” (sic)
Y nada más. El resto, lo que se ha comentado, algo de lo que se ha escrito y mucho de lo que ha circulado en los habituales corrillos y cenáculos cofrades y no cofrades quedan ahora desautorizados y desmentidos con el grupo que posa presidido por los dos hermanos mayores ante el altar de la Cofradía de la Magdalena.
Un ejemplo y, por qué no añadirlo, toda una lección de fraternidad y coherencia sobre el que podía figurar un elocuente pie de foto: Aquí no ha pasao ná.

Carta o cosa así para el señor Aznar.

De manera que dicen que usted se ha sentido digno y ha saludado al gallego con un “me alegro de verte bueno” mirando para otro lado como si le dijera “que no te quiero ve Juan Migué”…
Y yo que me creía que iba a ser al revés, que iba a ser Rajoy el que le iba a dar la mano así flojita como si la quisiera retirar de seguida recordando todavía aquello del toro mal lidiado, mal banderilleado y peor pasado de muleta que fue lo del americano con eso de las armas de destrucción masiva.
¡Mira que decirle que sí al americano! ¿Eso qué fue? … ¿para presumir de inglés?... Pues haber hecho como Zapatero arma mía que se monda de risa con el presidente del gobierno con el que peor puede entenderse porque es el húngaro y la lengua de Hungría aparte de los naturales del país no la hablan más que los osos que ya no vienen con la cadena al cuello.
A un Congreso de la UNDA (Organización Internacional de las emisoras de la Iglesia) fui yo y con los directores del País Magiar había que entenderse en latín. Sí, señor, con el mismo latín con el que los curas viejos celebraban el Santo Sacrificio de la Misa.
En vez de haberle dicho que sí y ponerse al teléfono, haberle contestado que estaba ocupado, o reunido, o jugando el dominó en Quintanilla de Onésimo que a lo peor el americano se lo creía y le dejaba tranquilo.
¡Pero mira que dar por buena la milonga esa de las armas de destrucción masiva y confiarlo así a los españoles sin afeitarse el bigote ni na…!
A Rajoy no le echaron el toro al corral. Se lo echaron a usted. Y es muy probable que se lo sigan echando hasta que no se refugie en el tendido, o mejor en la grada, o en la andanada de las Ventas, arribita del todo, para que no le vean, aunque se ponga un impermeable amarillo que trae mal fario y es el que mejor le va desde entonces.
A usted no le dicen esto los suyos porque se han educado en colegios de pago y aprendieron urbanidad por el plan antiguo que si llega a ser por el moderno… ¡menudo plan! Pero usted se lo tiene bien merecido. Vamos, se lo viene mereciendo desde que dejó que le organizaran la boda de su hija con ese muchacho del dolor de garganta – ¡ mira que apellidarse Agag,! - y se la divulgaran a bombo y platillo en las revistas de colorines.
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Si alguien con vocación de cartero en sus horas libres se la quiere depositar en su buzón cuenta con mi permiso y le quedaré muy agradecido.

viernes, 20 de junio de 2008

El Balance inacabado de un hermano mayor.

El hermano mayor tomó asiento ante su mesa de despacho y no se sintió incómodo, ni prepotente. Sus antepasados en el cargo, tiempo atrás, atendían sus asuntos en la modesta sala capitular de la hermandad, un reducido habitáculo que también servía de almacén y de oficina de secretaría, al que se ascendía por una escalera tortuosa que arrancaba desde la proximidad de la puerta de la sacristía del templo donde se veneraban sus amantísimos titulares.
Pero ya he dicho que eso era tiempo atrás. Cuando las consultas reservadas se evacuaban en un rincón del bar de la esquina a la orilla de unos frescos vasos de tinto, coloración muy adecuada porque era la de la túnica de ruán negro que vestían sus nazarenos.
Como se había cuidado al entrar de que la puerta de cristal plomado se cerrase bien y la claridad no era abundante, encendió su lámpara de mesa, uno de cuyos destellos iluminaba el rostro torturado del Cristo colgado en la pared a sus espaldas, extendió sobre el vade de cuero repujado una hoja de impoluto papel blanco y se dispuso a manuscribir el borrador del texto que, pasado por el ordenador, proyectaba dar al director del Boletín donde habría de ver la luz.
Con rayas verticales trazó tres columnas. La primera la encabezó con una B de bien.La segunda con una M de mal y encima de la tercera cerró una O que lo mismo era inicial de Omisión que de Olvido
No hubo de rebuscar mucho en su memoria para llenar el primer tercio de la hoja con lo que, de acuerdo con sus normas de valoración, había hecho bien durante los mandatos que ya finalizaban.
Al dejar caer su mano sobre la columna que presidía la M le pareció inspirado y oportuno redactar una especie de humilde súplica rogando disculpas para todo aquello que no hubiera estado correcto lo que le eximía de la obligación de recordarlo puntualmente. Y cuando, al fin se dispuso a finalizar su obra, alguien golpeó el cristal desde fuera y adivinó el contorno del responsable de la publicación que acudía en demanda de su escrito.Precipitadamente lo pasó al ordenador y la tercera columna se quedó sin redactar.
Cuando el boletín llegó a los hermanos, los que, por desaires injustos, estaban a punto de darse de baja… los que habían dejado de acudir a la Casa de Hermandad ninguneados días y días… los que habían sido criticados… los que habían sido desposeídos caprichosamente del inocente privilegio de un buen sitio en la cofradía, en ocasiones heredado… los que habían sido víctimas de maquinaciones para marginarles de una Junta o del acceso a un puesto de relevancia… todos estos se sintieron una vez más preteridos y olvidados y el hermoso Balance de valiente sinceridad que podría haber confeccionado ese hermano mayor se había quedado sin hacer.

miércoles, 18 de junio de 2008

Candidatos en portada.

Están los tres y quien ocupa en la actualidad el puesto al que ellos aspiran.
Los tres cofrades que se presentan a las elecciones para la presidencia del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla y el presidente actual. Es la portada de ABC de ayer, martes, 17.
Es sabido que la portada en este rotativo es como la primera de un periódico tradicional. Y a la primera se llevan según la praxis periodística, las noticias de mayor interés.
La fotografía ocupa el centro de la página y es la única que aparece en ella. Y no hay más que copiar los titulares de que es acompañada para comprender su fuerza: “El Gobierno sube la factura de la luz a las familias más que a las industrias”… “Defensa sigue sin recibir los 80 nuevos blindados”… “Gobierno y oposición celebran con visiones contrapuestas el año de mandato municipal” y “La expedición del DNI electrónico se multiplica por tres en Sevilla”. Importantísimas informaciones que afectan al bolsillo familiar, a la convivencia ciudadana y a la confianza en los rectores municipales.Pero todas muy inferiores en interés y atractivo a la que suscita el espléndido documento gráfico de Díaz Japón sobre el que se ha sobreimpresionado su correspondiente pie de foto: “Tres candidatos y ningún delegado de la Madrugada”
Desde muy antiguo, el periódico está enraizado en la vida sevillana y conoce de memoria la tecla que tiene que pulsar en cada momento.
En la foto, Manolo Román y uno de los candidatos, Adolfo Arenas, ocupan el sector de la izquierda según la contempla el lector. Y en el opuesto aparecen Juan Carlos Heras y Joaquín de la Peña. Hay un espacio entre las dos parejas que permite columbrar el patio porticado del Palacio Arzobispal iluminado por una luz cenital que se presta a interpretaciones deíficas.
El presidente y los tres candidatos sonríen. Habla Arenas. Román y de la Peña le miran sin ocultar una sonrisa abierta. Heras la refrena y no mira al locuaz Adolfo, sino al fotógrafo.
Los cuatro llevan corbatas. Los dos primeros se abrochan las americanas.De la Peña y Heras, no.
Desde que la fotografía instantánea se hiciera realidad en 1947 con la cámara Polaroid Land, estas imágenes captadas con la autenticidad de la vida misma constituyen elementos valiosísimos para el estudio psicológico.
Muy bien. Dirán ustedes.Pero ¿Quién va a ganar? Posiblemente pensando en el morbo que encierra la pregunta se decidió acertadamente el periódico a publicar la foto regalándole los honores del sitio y el tamaño.
Yo no lo se. Pero se me ocurre complementarla con una nueva: Exceptuando al que gane ¿Cuándo van a tener los otros candidatos la oportunidad de salir nuevamente en portada en el ABC?

martes, 17 de junio de 2008

Las cosas en su sitio.

Ayer me equivoqué en el uso del latín. En vez de redactar ictu ( in ictu oculi ) escribí actu. Y cuando lo advertí y me dispuse a corregirlo no encontraba los apuntes de mi cursillo de reciclaje para utilizar la informática y, por más que me peleaba con el ordenador, no conseguía nada.
Antes era otra cosa. En la redacción de los Servicios Informativos del Centro Emisor del Sur de Radio Nacional de España, con Antonio Gamito, José Ángel Bonachera o Fernando Carrillo, ninguno hoy con nosotros, pero todos de felicísima memoria, cuando te equivocabas en la Hispano Olivetti no disponías de otra solución que no fuera la de sacar la hoja y las copias que producía el papel calcar y escribirlo íntegramente de nuevo. Menos complejo; pero más trabajoso.
A punto estaba de conseguirlo cuando uno de mis cultísimos lectores – cada día dispongo de más pruebas para presumir de ello – me lo avisaba con un comentario y envolvía su irrefutabilis correctionis en el terciopelo de una coda elegante: “supongo que será un lapsus teclae.” ¡Ole!. ¡Así se dicen las cosas!
Lo mismito que te grita el niñato de turno en la carretera cuando se sitúa detrás de ti hostigándote con el cochazo que le ha prestado papá porque tu ruedas a setenta que es lo que está permitido y él corre a más de cien.
Menos mal que tu audición ha bajado un poco y solo aprecias (desprecias, mejor) su manoteo a través de la ventanilla.
Eliminado actu y situado ictu en su lugar lo que permanece es el mensaje estremecedor de la pintura ( en un abrir y cerrar de ojos ) de manera que puede ser la intromisión de la tecla indebida la causa del error, pero también el temblor de los dedos del escribiente que, recordando las pinceladas magistrales de Valdes Leal, tira ahora del latín macarrónico del Marques de las Cabriolas para confesar que le dejan caganditi por las pernas abajo.

lunes, 16 de junio de 2008

Entre pena y alegría.

De entierro estuve en la Caridad. Acudir a las ceremonias religiosa y profana de un sepelio y hacerlo en la Iglesia del Hospital que fundara el Venerable Don Miguel de Mañara, para un sevillano es vestirse de luto dos veces. Yo hace tiempo que entro sin quitarme las gafas de sol.Para que no me deslumbre esa luz que no se sabe de donde viene y arranca reflejos luctuosos de la carroña que viste de podredumbre los oros marchitos de los cuadros de Valdés Leal: “in ictu oculi.” “En un abrir y cerrar de ojos” me tiene que ocurrir lo mismo que le ha sucedido al amigo que preside la ceremonia embutido en su abrigo de madera. ¡Vaya tela!... Y el amigo de hoy era Nicolás Valero. Otro más. Como decía no sé quien: “De un tiempo a esta parte se están muriendo tantos amigos, que, al final no va a ir nadie a mi entierro”. Hay que pensarlo por seguir esa costumbre tan nuestra de ofrecerle a la muerte la muletilla plegada del desafío de Pepe Luis con el cartucho de pescao del chascarrillo que vaya usted a saber si en origen fue la frase de otro asistente tan conturbado como el que suscribe.
Nicolás me contó en un banco de la plaza del Duque una noche de insomnio veraniego su proyecto, que más parecía sueño imposible alumbrado por el calor, de su Centro Español de Nuevas Profesiones. Pero fue capaz de hacerlo realidad. Como otras muchas ideas felices para cuya ejecución no titubeaba en proponer que se sumasen a su aventura los más influyentes de su entorno.
Se casó con Teresa Garrido Conde que fue compañera mía en el Centro Territorial de Televisión Española cuando se hallaba instalado en el chalet de la Palmera a donde lo llevó otro sevillano también fallecido, Paco Narbona.
No es cosa que haga aquí el canto exequial de Nicolás para lo que me faltaría espacio, pero quiero decir con esto que su desaparición me ha afectado bastante y me he sentido desamparado y triste.
Mas, al salir del templo, me aguardaba la alegría. Saludé a mi admirado Antonio Burgos a quien telefonéo de vez en cuando para trasladarle mi aplauso por sus comentarios en ABC y me sorprendió su felicitación hacia mí por mi redacción de estas breves reseñas de la vida diaria a la que me entrego con mas voluntad que acierto, confesándose como lector habitual de este Blog.
Como yo, igual que otros muchos que nos dedicamos a esto, lo digan o no, tengo a Antonio por uno de mis padres literarios, pues, ¿qué quieren ustedes?, me sentí profundamente halagado. Tanto que no he dudado en traer mi emoción a estos renglones y, si me suponen enrojecido, disimulo mi tardío rubor diciendo que es por el calor que he pasado en la iglesia de Don Miguel a pesar de la cercanía de uno de sus ventiladores.

domingo, 15 de junio de 2008

Elecciones en las cofradías

Es tiempo de comicios cofrades este mes de Junio que ya va por su mitad. Algunos se han celebrado ya.Otros se hallan en puertas. Y, entre estos, dos muy importantes, el del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla y el de mi Hermandad del Calvario.Para el primero se presentan tres candidaturas. Para el segundo, dos.
Siempre es bueno que se abra el abanico democrático. Una sola candidatura resulta hoy sospechosa. Invita a suponer una penuria de aspirantes que abre la caja de las preocupaciones ante el declive de la corporación o la falta de interés participativo de sus miembros. Varias opciones suscitan, sin embargo, el temor de una fragmentación en el colectivo. Pero sin duda es deseable este horizonte en el que se mueven grupos activos de hermanos comprometidos.
Entre una y otra opción se encuadra la de las dos únicas candidaturas que, personalmente, me parece la más detestable para el futuro de la corporación en paz, armonía y convivencia.
Sin referirme en concreto a ninguna hermandad, y menos a la mía, su análisis, desde el plano puramente teórico, aunque sea somero, me avisa que la candidatura bis suele nacer en más de una ocasión como respuesta de los integrantes de la Junta de Gobierno saliente que no han sido llamados para integrarse en la nueva. Su cuna, pues, empieza a tramarse en la amargura de la marginación. Y, para justificar su necesidad y atraer voluntades, provoca un clima alarmista creado artificialmente que con frecuencia se carga con minusvaloraciones de los otros candidatos.
Lamentablemente esta actitud puede resultar muy perjudicial para los máximos rectores de la hermandad en proceso electoral para quienes ya se cumplió el plazo legal de reelección, si se interpreta que se prestan a colaborar en el juego e incluso apoyan de alguna manera al segundo grupo.
No deja de parecer sorprendente que los cofrades actuales herederos de aquellos que supieron ejercer los más nítidos procesos democráticos para la elección de sus gobiernos precisamente cuando la democracia permanecía aherrojada en las covachas de la dictadura, no sepan ahora, en tiempos de libertad, ejercer ésta sin el revanchismo o la soterrada ambición de continuar manteniendo cuotas de poder en la sombra que se desprenden de no pocos procedimientos electivos mas hijos de la mala política civil que de la buena fraternidad a que están llamadas tanto las hermandades de penitencia, como las de gloria y sacramentales.

viernes, 13 de junio de 2008

Las victimas de siempre.

No se ha medido, y desconfío que se vaya a medir, el desequilibrio psíquico que ha causado la huelga del transporte, con sus inevitables repercusiones en aspectos absolutamente vitales para todos como el suministro de las subsistencias, en dos sectores tan vulnerables de la colectividad como son el de los mayores y el de los niños.
Para las personas de edad, su casa, su pan y sus potingues conforman el plano sobre el que se asienta su estabilidad emocional y si dos de las patas de este trípode son agredidas, ésta se rompe irremisiblemente.
Rastreando los programas radiofónicos de esas horas nocturnas en las que el pálpito vital de quienes dejan la huella titubeante de sus vidas en el camino hertziano ofrece compañía a nuestro desvelo, he recogido curiosas muestras de este desequilibrio: Una mujer de unos sesenta años había adquirido noventa cajas de leche y más de cien rollos de papel higiénico… un hombre que parecía hallarse en el entorno de los setenta se llevaba cincuenta pollos… en una farmacia otra criatura de similar edad, sorprendida y asustada, había comprado no sé cuantos rollos de algodón y parecida exagerada cantidad de cajitas de aspirina…
En circunstancias excepcionales no existe módulo para el acopio de víveres y medicamentos. Las previsiones se justifican por un atávico temor a lo desconocido.
Es como cuando la tierra se pone a temblar sin aviso previo. Ante el terremoto el terror paraliza o desboca a todos aquellos a quienes sorprende y la decisión suele desarrollarse por sendas imprevisibles.
Pero siempre los ancianos y los niños resultan las víctimas más vulnerables.
Varias mamás jóvenes se quejaban el otro día enviando mensajes desde sus móviles, que se mostraban sobreimpresionados en la pantalla de Antena tres, porque carecían de leche para sus bebés.
Y los mayores se ven obligados a rememorar esos tiempos de hambre y miedos de la posguerra que descienden hasta los más profundos de la guerra misma para los más ancianos.
Esto sí que es memoria histórica y no un artificio coyuntural banalmente caprichoso.

miércoles, 11 de junio de 2008

Vacas flacas y toreros míticos.

Ea.Ya está. ¡Albricias! Estamos salvados. Frente a la crisis (perdón, no hay crisis; desajustes) ni la sensibilidad del primer teniente de alcalde del Ayuntamiento sevillano, Antonio Rodrigo Torrijos, eliminando o modificando algunos nombres del callejero en función directa de su oportuna decisión, mientras en la tele, las madres jóvenes claman porque,a causa de la huelga del transporte, carecen de leche para sus bebés,… ni las caricias al idioma (patadas, no, por Dios) de la inefable ministra de “Igual da”, la gaditana Bibiana Aído , inventando palabros para delicias de sus paisanos de las Chirigotas…. (Fui el primero que comentó el Carnaval de Cádiz en la Tele, pero me encantaría podérmelo pedir sin cobrar ni un duro en la próxima edición)… nos proporcionaba lo que nuestro subconsciente estaba pidiendo. Lo mismo que en los años cuarenta con el pan de afrecho y las cartillas de racionamiento. Un torero.
Entonces, llegó Manolete. Ahora, José Tomás.
Sin embargo, tratando de que todos nos relajemos un poco que falta nos hace, confieso que esta aparición no está siendo seguida en mi concepto con los criterios de aprovechamiento y originalidad que debiera.
La corrida de Puerto de San Lorenzo que lidiará el estelar espada el próximo domingo en la plaza de Las Ventas, en el segundo y último de los compromisos del madrileño con la afición , se embarcó precipitadamente antes de que diera comienzo el conflicto y hace días que pasta en los corrales de la plaza.
Una pena. Obviamente el festejo se celebraría aun con todos los camiones retenidos por los piquetes. Y más todavía los que se dedican a mover el ganado bravo.
¿Qué habría qué hacer entonces?... ¿Suspender la corrida? Eso nunca. En última instancia hasta podría optarse por la romántica solución de conducir los seis toros mas los dos sobreros desde Salamanca hasta la capital del Reino por trochas y veredas como se hacía antes rodeados de la correspondiente parada de cabestros y precedidos por el mayoral de la ganadería a caballo que, en esta ocasión, probablemente, iría acompañado por el inevitable Florito.
Salvador Távora se deleitaría con una escena semejante que a buen seguro cuidaría para que fuese pródiga en espectacularidad y belleza. Y Gérard Depardieu, el famoso actor francés ratificaría lo que acaba de proclamar en una entrevista al periódico Midi Libre que” la fiesta es algo formidable.”
Todo se ha perdido por la prisa de los empresarios. Y es que ya se sabe que en los toros y en el amor… despacito es mejor.

martes, 10 de junio de 2008

Banderitas azules y mancha roja.

Como me habían anticipado algunos visitantes asiduos de las costas de Huelva, confirmé que la aparición en el mar de una gran mancha de color rojo de varios kilómetros de largo por 4 ó 5 de ancho el pasado domingo obligó al Ayuntamiento de Lepe a cerrar al baño un tramo de la playa de La Antilla señalizando con boyas la zona e izando la bandera roja. Técnicos de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta se desplazaron a la zona y comenzaron a analizar su origen.
La noticia me preocupó. El pasado viernes, mi entrañable compañero y amigo Andrés Luis Cañadas escribía en su Blog
( http://elblogdeandrescanadas.blogspot.com/ )
que “recientemente se ha conocido, a través de distintos medios informativos, que la provincia de Cádiz ha perdido este año varias banderas azules, ese distintivo que indica a los ciudadanos que una playa goza de buena salud”…. “Naturalmente, en cuanto la noticia de la pérdida del distintivo de calidad ha sido divulgada, los respectivos Ayuntamientos afectados han alzado la voz - después, no antes - para poner en entredicho el sistema que se aplica en la adjudicación de tales banderas.”
No están las cosas para acudir a destiempo a resolver los males que puedan ser evitados. De la bondad de nuestras playas depende no solo el legítimo asueto de quienes las ocupan en vacaciones sino una parte sustancial de ese turismo con el que puede equilibrarse nuestra balanza de pagos. Las banderitas están muy bien, pero los colores de las manchas, muy mal. El dictamen de los técnicos que han ido a la Antilla aparece en la prensa de hoy y afirma que la mancha responde a un proceso de origen biológico por la puesta masiva de huevas.
¿Huevas de qué? ¿De grillos hartos de tomate?... Perdóneseme la “boutade”… Una macha así requiere explicaciones más completas y convincentes. Porque, si no, alguien dirá con razón que la cosa tiene huevas… en masculino plural.

lunes, 9 de junio de 2008

El PP lo hace muy bien.

“Agua troná… o mucha, na”, decían en el campo andaluz cuando el cielo se calaba hasta las cejas la boina parda de las nubes y encendía continuamente su mechero de yesca en relámpagos de susto.
Ahora ha empezado la tormenta en la carretera y en los grandes almacenes distribuidores de viandas desabastecidos por la huelga del transporte. La tormenta se veía venir, pero los que tenían que haber acudido con presteza por los paraguas, los impermeables y los plásticos protectores, se quedaron quietos mirando bobaliconamente al cielo.
Ya escampará, se dijeron probablemente. Y parece que no. Que el agua seguirá inclemente como cuando desbordaba ríos y los clérigos ilustres habían de encaramarse a los campanarios para impetrar con reliquias la protección de los cielos.
¿Qué hace el PP ante este problema que puede ser más serio de lo que intentan vendernos con maquillajes de urgencia los que dicen que gobiernan?... Nada.
¿Y eso es bueno?... Perfecto.
Mientras el presunto partido de la no menos presunta oposición siga enredado en sus continuas disputas domésticas, se verá forzado a una inanición que, en este caso concreto, oh paradoja de las paradojas, resulta altamente beneficiosa.
Nadie podrá echarle la culpa de todo lo que ocurre.
Se acabaron las continuas quejas a sus proclamas tildadas de apocalípticas… a su alarmismo que decían infundado.
Por primera vez en mucho tiempo el PP lo hace bien.

sábado, 7 de junio de 2008

La Sexta, anticlerical, pero sin cerveza

Las campañas contra la religión católica de ese nuevo canal de televisión que no hay manera de sintonizar bien y que se denomina La Sexta comienzan a pasarle factura.
Tras la gran avalancha de suscripciones a la alerta creada por la plataforma cívica “Hazte Oír” frente a la política de ofensa a los sentimientos religiosos emprendida por esta emisora, la multinacional cervecera Heineken España, uno de sus principales anunciantes, por medio de su director de Relaciones Públicas, Diego Antoñanzas, ha informado que a partir de este momento le retiran toda la publicidad.
La drástica decisión ha estado motivada por los contenidos del lamentable espacio “Salvados por la Iglesia”.
En realidad no debiera haber hecho falta el clarinazo de Hazte Oír, comunicadora digital a la que se puede acceder con facilidad desde este medio, (www.hazteoir.org). La ciudadanía no envenenada ni manipulada es pródiga en protestas de todo matiz que deben llegarle a los gestores de La Sexta y están motivadas por este atávico anticlericalismo que cultiva. Y, por si fuera poco, El Observatorio Antidifamación Religiosa se ha sumado a las denuncias cívicas a raíz de la emisión de la primera parte del espacio en cuestión y estudia posibles acciones legales ante la violación del artículo 525 del Código Penal.
Cuando empezó La Sexta y actuaron algunos de sus presentadores estelares parecían modernos e ingeniosos y, por supuesto, daban la impresión de que ya habían superado los años treinta del siglo pasado.
Ahora se ve que no.Bien pues que con su pan se lo coman y con un sorbito de agua porque cerveza no van a tener.

viernes, 6 de junio de 2008

Candidatos para el Consejo

Ya está. Ya se conocen los nombres y los rostros de quienes acompañarán a los tres candidatos que se van a presentar a las elecciones para renovar el Consejo de Hermandades y Cofradías de Sevilla el próximo lunes veintitrés de este mes.
Han aparecido en tres documentos gráficos en el último número de la revista “Pasión en Sevilla”
Treinta y seis cristianos comprometidos, once por cada opción,más cada posible presidente, dispuestos voluntariamente a asumir toda clase de trabajos, esfuerzos, penalidades y sacrificios para defender día a día la fe y la religiosidad desde el mundo de las hermandades de penitencia, de gloria y sacramentales.
En este momento histórico en que la Iglesia es combatida desde tantos frentes, todos los católicos deberíamos sentirnos legítimamente orgullosos y agradecidos a este exquisito grupo de paladines y paladinas – Heras es el único que no lleva mujeres – que se disponen a consagrar su legítimo asueto y hasta sus horas de sueño a esta misión no siempre sabida y menos comprendida por todos.
A los miembros del Consejo se les suele ver a lo largo del año vestidos de chaqué en las procesiones solemnes, en el Santo Entierro, en el Corpus, en la Virgen de los Reyes… departiendo de igual a igual con autoridades locales e incluso de mayor rango…ocupando el lugar de honor que les corresponde en las celebraciones cofrades…
Pero… ¿creen ustedes que solo esto les alienta a mover Roma con Santiago para pertenecer a él?...¡Que equivocados estaríamos si pensáramos así!

jueves, 5 de junio de 2008

Gramática parda

A Joselito lo llamaron por teléfono sobre las ocho y media o las nueve. De la tarde noche. Estaba cómodamente repantigado en su sillón viendo los toros y escuchó la voz:
- Le habla Telefónica. ¿Es usted José García García?
Dijo que sí. Y continuó escuchando muchas eses en su sitio y muchos finales en ado, ido y edo sin pronunciar ao io y eo como él hacía siempre.
- Escuche señor García. Telefónica desea hacerle una oferta muy interesante para usted.
Morante empezaba a instrumentar unas chicuelinas antológicas.
Joselito cortó:
- Perdone, señorita.Estoy viendo una corrida de toros por televisión. No puedo atenderla.
Colgó y no añadió más. Al día siguiente volvió a llamarle la misma voz con más eses enredadas en el hilo y más ados, idos y edos que llegaban al oído de Joselito como pescozones en la nuca.
-- Señorita, son las nueve. Telefónica debe hallarse muy satisfecha con una operaria que trabaja a estas horas.
-- Escuche, atententamente señor García. La oferta es muy interesante para usted.
Y entonces el bueno de Joselito, setenta y dos años según su DNI y setecientos o más de acuerdo con la vieja cultura andaluza de su sangre, echo mano de su gramática parda y extrajo un argumento convincente.
-- ¿A mí?... Si esta es la segunda vez que telefonea buscándome a la caída de la tarde cuando ya ni hay bancos, ni tiendas abiertas, ni na de na… la oferta le interesará a Telefónica y posiblemente a usted. A mi, no. Ea. Haga usted er favo de dejarme en pa.
Y colgó con tanta firmeza que el chasquido le pellizcó la oreja a la señorita que llamaba.

El Rocío después de Pentecostés

He vuelto al Rocío. La aldea me ha recibido extendiendo bajo mis pisadas la arena esponjosa y seca y abriendo en el horizonte, que se prolonga hacia el Atlántico, la Madre de las Marismas donde pastaba una piara de caballos.
Un guardacoches de piel tostada y carencia de identificación me ha pedido un euro y la voluntad por dejar el vehículo aparcado bajo la inclemencia del sol tras los troncos clavados que limitan a los ingenios rodantes el acceso a la explanada que se extiende ante el Santuario. Y he entrado en él. Semivacio.Pero vacío, no. Nunca. Serían las cuatro de la tarde y el ciego que pregona ante la puerta seguía allí. Tal vez se vea – o no se vea, se sienta- obligado a echar horas extraordinarias, me dije, pero cuando continúa es porque vende cupones. En la Blanca Catedral marismeña siempre hay fieles que acuden a postrarse ante la Virgen.
El suelo estaba limpio y el altar, brillante. Yo, como rociero antiguo, de aquellos tiempos en los que la presentación de las hermandades daba comienzo a las cinco de la tarde del sábado, añoro la sencillez cercana del que precedió a este desbordamiento de oros y volutas. Y no sé si la Junta de Gobierno de la Hermandad Matriz ha previsto el abultado presupuesto que habrá de invertir de aquí a nada en la limpieza de las esculturas que lo adornan. Porque cuando la arena desprendida de los botos de la multitud de romeros de los días grandes, convertida en polvo, asciende hasta las bóvedas no hay quien les libre de ser afectados por esa capa blanquecina que alguien denominó con exagerada metáfora el incienso de la marisma.
Pero, con independencia de esto, otros temas cautivaron mi atención. Un grupo de adolescentes hijos de emigrantes europeos, trabajadores ocasionales en la recolección de las fresas, postrados devotamente ante el altar. Y una muchachilla que avanzó entre los bancos abrazada por los hombros por un acompañante de su misma edad, al que dejó sentado en ellos para encaminarse sola y subir hasta la baranda que circunda el presbiterio aferrandose a los barrotes mirando la cara de la imagen. Estuvo así largo rato. Cuando regresó a los bancos, descendió los escalones protegiéndose con las manos el bajo vientre. Y advertí que estaba embarazada.

martes, 3 de junio de 2008

¿Hay alguien ahí?

Invitó un compañero mío, colaborador en programas de radio, a Joaquín Carlos López Lozano, el que fuera influyente director del periódico ABC de Sevilla, presidente del Ateneo y presidente de la Diputación Provincial, a una entrevista en una pequeña emisora que había empezado a funcionar en FM.
Joaquín Carlos estuvo ingenioso, inteligente y brillante. El espacio de las ondas se llenó de interesantes reflexiones y luminosidad de ideas. Cuando finalizó y mi amigo le hacía el honor de acompañarle en el ascensor hasta la salida escuchó que le preguntaba,
-- ¿Tu crees que esto lo ha oído alguien?
Es la interrogante desoladora que se abre cuando se apaga el rojo del fluorescente On the air. En el teatro, por lo menos, se percibe el palmoteo de los aplausos, aunque sean débiles. En la radio entonces se desconocía todo y aun se ignora hoy hasta que llegan los datos fríos de los taumaturgos de las encuestas.
Por eso me ha sorprendido muy gratamente encontrar sobre el felpudo de mis últimos comentarios en este blog la huella de unos cuantos ciudadanos de la blosfera – muchos más de los que me hubiese atrevido a imaginar - que han tenido la atención de visitarlo.
¡Albricias!... Esto marcha, me he dicho. E inmediatamente lo escribo aquí para darles las gracias.

lunes, 2 de junio de 2008

Con más valor que el Guerra

Hay dos jiennenses que guardan en su corazón tanta valentía como los más templados espadas de la tauromaquia actual.Los dos se apellidan Montes. Uno es Álvaro, un rejoneador tan atrevido que, por intentar recientemente en la plaza de las Ventas una difícil pirueta a caballo en la cara del toro, éste les derribó haciendo rodar sobre él a la cabalgadura y seccionándole media oreja lo que le obligó a pasar a la enfermería.
El otro se llama Eduardo y es hijo y heredero del recordado Higinio, irrepetible pionero de la tele andaluza y desafía las embestidas de los cornúpetas a campo abierto con una cámara rodando para Canal Sur.
Al primero que carece de antecedentes en la tauromaquia – su padre es un importante proveedor de áridos y otros materiales para la construcción – le hice un poemilla que incluí en “Balconcillo de sol”, manojo de versos taurinos que publiqué hace dos años:

Álvaro Montes, torero
Aunque no tiene montera;
Mas sí la sal pinturera
del andaluz con sombrero.
¡Qué pellizquito campero,
mezcla de risco y satén,
da su moderno vaivén
al actual rejoneo!
¡Qué perfección de toreo!
¡Qué despacito, qué bien!

Joven, vibrante, valiente.
Llega enseguida a la gente…
Y es de Jaén.

Al segundo, a Eduardo, no me atrevo a escribirle nada porque necesitaría un caudal de inspiración de poesía épica solo para encender el ordenador.
Ayer, como cada domingo, en el programa “Toros para todos” que dirige y presenta Enrique Romero, nos ofreció un atractivo muestrario de la auténtica belleza del campo de las ganaderías de bravo capaz de hacer más afición que muchas corridas televisadas.
Dos quehaceres distintos pero ambos coincidentes en la defensa de la fiesta más española y, por eso mismo, más denostada por quienes todos sabemos.

domingo, 1 de junio de 2008

Elecciones en las cofradías

Un querido amigo y compañero con el que suelo reunirme a cenar de vez en cuando, porque nuestras esposas son muy amigas igualmente y esto es lo mejor -yo diría que la receta áurea para que dos parejas tradicionales, es decir las de hombre y mujer, aparte de las de la Guardia Civil del Duque de Ahumada- se lleven bien, me informaba que el hermano mayor recientemente elegido de la muy señera hermandad y cofradía de Pasión, Javier Criado, porta consigo un abultado dossier que le había mostrado en el que figuran todas las lindezas que se han dicho de él a través de Internet tratando de conducir la inclinación de voto hacia la candidatura contraria.
Nuestras respectivas que son inocentes y cándidas en estos asuntos se echaron las manos a la cabeza.
Yo, al que ha afectado y afecta el proceso electoral que empieza a vivirse en mi Hermandad del Calvario, al que habré de referirme seguramente al correr de los días, recordé ese sistema tan ruin y malvado empleado desde antiguo por los cofrades para desvalorizar a su posible contrincante… “es que, con Fulano… desde que pasó lo que pasó… “ y si alguno pregunta, fiel a la transparencia democrática qué fue lo que pasó recibirá la sublime y almibarada respuesta de… “lo que pasó… por caridad vamos a dejarlo aquí”.
Con lo que, tirando la piedra y escondiendo la mano, queda abierta cualquier interpretación imaginativa y falaz del presunto “lo que pasó”.
Y así caminan algunos de los que vienen perpetuándose, saltando de un puesto a otro, por ese tortuoso camino de la interioridad de las cofradías…tratando de que nadie cuente con luz y taquígrafos qué es lo que verdaderamente viene pasando… con ellos.

EL CID conquista nuevamente a Madrid

Y lo ha hecho en la tarde hoy, cierre de las corridas de Feria de este año en la Plaza de Toros de las Ventas, con su autenticidad,con su verdad,con su poderío, con su dominio de las suertes y con la desmedida entrega que siempre ofrece a la afición madrileña.
El Cid frente a los Victorinos. En las taquillas el cartel de "no hay billetes" y en los tendidos el viejo ganadero tan emocionado que hasta se le desprendió de la boquilla su habitual veguero,acompañado de su hijo que no fuma y que participa de la misma opinión de su progenitor: Ojalá y todos los toros de su ganadería fuesen lidiado por el maestro de Salteras.
Es el que mejor los entiende, el que mejor los luce y el que más se atreve a desafiar sus imponentes encornaduras, su peligroso sentido y, como ha sucedido en la corrida de hoy,su fiereza convertida en velocidad en la sucesión de embestidas dificilísimas de templar.
Bien sé que esto no es una crónica al estilo de las que leía Rafael Santisteban ante los microfonos de Radio Sevilla de la Cadena SER con textos de Enrique Vila y patrocinio del Gran Fino Tio Mateo de Palomino y Vergara.
Pero permitanme mis hipotéticos lectores que como homenaje a los naturales del gran torero sevillano - Salteras es para Sevilla algo así como Triana y, como el barrio singular, ostentó el privilegio real de ser "guarda y collación de la ciudad" - reproduzca un soneto que le escribí y se exhibe colgado en una pared de su peña:

La zurda de este Cid podría ser
experta con primor de cirujano,
caricia de las teclas de un piano
repique en castañuela de mujer…

o dulce lenitivo que tener
dispuesto hacia un dolor siempre a la mano.
Qué tierna, qué suave, en soberano
requiebro con la seda del poder.

Qué mano es esa izquierda, qué torera,
qué látigo gentil, qué primavera
perfuma frente al toro su silueta.

Así toda embestida de la fiera
se pierde entre la tela, prisionera
del aire en que se mece la muleta.