domingo, 11 de noviembre de 2012

Algo más que chapa y pintura

Me sorprende y maravilla la facilidad con que los reyes y princesas del colorín entran en el quirófano. Y lo sonrientes que aparecen luego posando al desgaire para los fotógrafos y reporteros de las televisiones que conceden a las crónicas de color presencia relevante. Noticias son los partos y noticias son también los estrenos de caras. Hace poco nos han traído las páginas de las revistas que se dedican a estos temas el nuevo rostro de una de estas representantes cualificadas del sector rosa. He perdido la cuenta de las veces que esta mujer se ha puesto en manos de la cirugía. Que ha adelantado muchísimo, no cabe duda. Pero que no deja de ser una especialidad médica que está muy lejos de la simple receta de una aspirina. Cuento esto porque el que se va a retirar a un obligado internamiento clínico soy yo y no quiero que mi ausencia de esta bitácora sea interpretada ni como nuevas vacaciones ni como dejadez de este grato contacto con quienes tienen la paciencia de visitar mi blog. Supongo que dispongo de cama prevista en el Hospital Macarena y quienes lean esto y conozcan la calidad de estas instalaciones clínicas de la sanidad andaluza deben deducir que no es precisamente para un repaso superficial de chapa y pintura. Los automóviles no ruedan bien si, de vez cuando, no se abre el capó y se sustituyen algunas piezas gastadas del motor. A eso voy. Así que si me buscan entre estas líneas y no me encuentran ya saben donde voy a estar. Por supuesto que lo hago con el respeto que siempre me han merecido los cirujanos, los anestesistas y todos los admirables profesionales de la medicina servidores de los quirófanos. Y también con la confianza a que se hacen acreedores quienes obtienen cada día silenciosos éxitos quirúrgicos impensables poco tiempo atrás. Ahora bien, de cambiarme caprichosamente la cara, nada de nada. Si una mañana me asomara al espejo y, desde él, me saludara otro señor me llevaría un susto morrocotudo. Y más si tuviera en la puerta una colección de paparazzis dispuestos a divulgar la noticia

1 comentario:

Papasmarrone dijo...

Ahora lo entiendo. Excusatio non petita......