Con rigurosa observancia a la norma establecida,el
Consejo de Cofradías, reunido el pasado sábado por la tarde, lo designó en una
votación inédita, puesto que se hacía siguiendo las directrices que marcan los
nuevos estatutos. O sea, elige sólo la junta de la sección de penitencia, y
luego ratifica el conjunto de la junta superior.
El designado ha sido Francisco Berjano
Arenado, actual hermano mayor de la Hermandad de la Vera Cruz, que no se
lo esperaba y que según propia confesión en la primera rueda de prensa
celebrada tras recibir el nombramiento, no ha dado un pregón en su vida.
Buena revelación.Los pregoneros o pregoneras que se entregan con
fruición a un continuo meritoriaje en exaltaciones
menores tanto de penitencia como de gloria suelen levantar hoy algunas
reticencias.
La noticia le pilló ante la Blanca
Paloma en la aldea del Rocío, donde su hermandad había ido en su anual
peregrinación ante la Reina de la Marismas, cuando sonó su móvil con la llamada
del Consejo.
Al filo de
las once de la noche, tras el regreso acudió a la sede de la institución
cofradiera y dijo eso y algo más. Algo que puede orientar del esquema de su
futuro escrito: “Si mi pregón sonara a homilía, que trataremos que no, pues
será una homilía, porque es Quico Berjano el que está dando el pregón. Si no,
que hubiesen elegido a otro. Será un pregón de Iglesia, que hable de las
cofradías en la Iglesia en el contexto actual. Un pregón a la santa cruz. Hasta
ahí puedo llegar. Ése será mi pregón".
Interesante y necesario proyecto en el momento actual. Su
predecesor como Hermano Mayor de su Cofradía y como pregonero en 1978, el
recordado Antonio Soto Cartaya, hizo lo mismo.
Y también lo justificó desde el principio de sus palabras
aquel domingo doce de marzo en el teatro Lope de Vega.
Lo voy a
echar mucho de menos, aunque para los que le conocimos nos será fácil imaginar
la delicadeza y la prudencia que emplearía para ensartar alguna recomendación
al debutante.
Antonio, hombre de ciencias,era catedrático de Fisica
y Química en la Universidad Laboral… Francisco Berjano, hombre de letras,
magistrado juez
Los dos, cristianos bien formados y de fe acrisolada.
Que se me perdone lo que alguno pueda entender como exageración.
Como en la elección de Papa, creo que el Espiritu interviene siempre. Y más
cuando hace falta.
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